Patio de los leones

En la Alhambra de Granada (declarada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad). El patio se comenzó a construir en 1377, por deseo de Mohamed V, hijo de Yusuf I, siendo su alarife mayor Abén Cecid, concluyéndose trece años después. Los árabes de Granada, antes de llamar al Patio de los Leones Sahan al-Osud, lo hicieron con la denominación de Al-Haram. El lado oriental es mayor que el que da a poniente, rodeado por una esbelta galería con 124 columnas de mármol blanco de Macael (Almería), las cuales se agrupan, a más de las exentas, en conjunto de dos, tres, y hasta cuatro en las esquinas, sustentando, las arcadas de filigrana, siendo simétricos los lados mayores y asimétricos los menores. Alrededor, las alcobas, salas privadas del sultán y esposas con piso alto abierto, falta de ventanas que miren al exterior, con jardín interior como corresponde a la idea musulmana del paraíso. De cada sala fluyen 4 arroyos que van al centro: los 4 ríos del paraíso. Las columnas se unen con paños calados que dejan pasar la luz. Fustes cilíndricos muy delgados, anillos en la parte superior, capiteles cúbicos sobre los que corren inscripciones. Las planchas grises de plomo convierten los empujes horizontales en verticales. Los dos templetes que avanzan a los dos lados opuestos del patio son como un recuerdo de la tienda de campaña de los beduinos. Son de planta cuadrada, decorados con cúpulas de madera que se apoyan en pechinas de mocárabes.
Tanto los leones como la taza, datan del siglo XIV. Hay tres tipologías de leones en base a sus elmentos formales diferenciadores. Cada una la conforma un grupo de cuatro leones con similitud dos a dos en sus rasgos: nariz, pelaje de la melena, fauces y posición y relieve de la cola.
Los doce leones tienen una simbolización astrológica, cada león alude a un signo zodiacal. Por otra parte, tienen una significación política o mayestática que está relacionada con el templo del rey Salomón (puesto que hay una inscripción en la fuente referida a este) y el mar de bronce del mismo templo. También aluden a un símbolo paradisíaco refiriéndose así a la fuente, originaria de la vida y los 4 ríos del Paraíso. La fuente como tal es una alegoría del poder que reside en el sultán.

Félix Velasco